Tritón palmeado - Lissotriton helveticus (Razoumowsky, 1789)

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Portada

 

Identificación

 

Estatus de conservación

 

Distribución

 

Hábitat

 

Ecología trófica

 

Biología de la reproducción

 

Interacciones entre especies

 

Comportamiento

 

Bibliografía

 

 

 

Key words: Palmate Newt, activity, home range, movements, behaviour.

 

Actividad

La actividad anual varía de unas poblaciones a otras en función de la climatología. Así, el período de actividad acuática en las zonas más elevadas suele comenzar en abril o mayo, mientras que en zonas con clima suave inician la actividad acuática durante el invierno, normalmente entre diciembre y febrero dependiendo de las poblaciones. Por lo general abandonan el agua entre junio y agosto, una vez transcurrido el período reproductor, pero en regiones de clima suave algunos ejemplares pueden permanecer en el agua mucho más tiempo, incluso durante todo el año (Montori y Herrero, 2004)

En Galicia, por debajo de los 100 m de altitud, pueden encontrarse machos en el agua hacia mediados de noviembre, mientras que las hembras comienzan a entrar en el agua hacia finales del mismo mes. En estas poblaciones abandonan los medios acuáticos entre junio y agosto (Galán, 1985). Las poblaciones gallegas que habitan en áreas con altitudes comprendidas entre los 250 y los 450 m comienzan a entrar en el agua en diciembre y la abandonan también durante los meses más cálidos, entre junio y agosto (Galán, 1985). En zonas de mayor altitud (El Caurel, 1.300 m) la actividad de esta especie se extiende de marzo a junio (Bas, 1982). En zonas de baja altitud de Asturias, Braña (1980) encuentra ejemplares adultos en el agua a partir de finales de enero. En Bulnes, a 700 m de altitud, aún pueden encontrarse algunos ejemplares en el agua en agosto (García-París, 1985). En Burgos se encuentran en el agua a partir de marzo, aunque en zonas altas y frías como en el Pozo Negro (Sierra de la Demanda) se retrasan hasta mayo (Barbadillo, 1987). En zonas bajas de Gerona están en el agua a mediados de enero y en los Pirineos orientales (1100 m) en marzo (Montori y Herrero, 2004). En zonas de baja altitud en Cantabria (61 m) pueden observarse algunos ejemplares en el agua a lo largo de todo el año; sin embargo, aunque su migración hacia las charcas en las que se reproducen comienza entre enero y febrero, no es posible encontrar en el agua gran número de tritones palmeados hasta finales de marzo (Diego-Rasilla y Luengo, 2007). En zonas de media montaña de Cantabria (382 m) el período de migración hacia las charcas se extiende desde finales de marzo a principios de mayo (Diego-Rasilla y Luengo, 2007); tanto en las zonas bajas como en las de media montaña abandonan el agua durante julio y agosto (Diego-Rasilla y Luengo, 2007). En el Parque Nacional de los Picos de Europa se observan adultos en el agua desde el final de febrero hasta finales de septiembre (Ayllón et al., 2010).

Durante la fase acuática muestran una notable actividad diurna, permaneciendo normalmente en el fondo o entre la vegetación sumergida; por la noche suben con frecuencia a la superficie, pasando prolongados espacios de tiempo junto a la orilla o sobre la vegetación acuática. Durante la fase terrestre permanecen refugiados durante el día, mostrándose activos durante las noches húmedas o lluviosas (Montori y Herrero, 2004; Diego-Rasilla y Ortiz-Santaliestra, 2009).

Una vez finalizada la fase acuática, algunos individuos de los que llevan vida terrestre, regresan al agua en otoño para hibernar enterrados en el fondo, mientras que otros hibernan en tierra, enterrados o bajo el musgo (Fretey, 1975; Braña, 1980). En las poblaciones lacustres de alta montaña la hibernación frecuentemente se produce de forma mayoritaria dentro del agua, a veces al quedar atrapados bajo la superficie helada. Las poblaciones de baja altitud del sur y noreste de Cataluña, además de un corto período de hibernación presentan un período de inactividad estival como consecuencia de las elevadas temperaturas (Montori y Herrero, 2004). Los juveniles y subadultos tienen hábitos terrestres y regresan al agua al alcanzar la madurez sexual.

 

Dominio vital

No hay datos ibéricos.

 

Movimientos

Los adultos normalmente hibernan en los alrededores de sus charcas de reproducción, en un radio de unos 150 m. Los juveniles tienen hábitos más terrestres y una gran capacidad de dispersión y colonización de nuevas áreas, cubriendo distancias de hasta unos pocos kilómetros (Montori y Herrero, 2004; Diego-Rasilla y Luengo, 2007).

Los machos son los primeros en llegar a los medios acuáticos en los que se reproducen (Braña, 1980; Galán, 1985; Diego-Rasilla y Luengo, 2007). Para orientarse hacia estos medios acuáticos los tritones palmeados pueden utilizar la información que obtienen del campo magnético terrestre (Diego-Rasilla et al., 2008); en ensayos experimentales son capaces de orientarse de retorno a las charcas de reproducción desde distancias considerables (19 km), utilizando el campo magnético terrestre como única fuente de información direccional (Diego-Rasilla et al., 2008).  Se ha demostrado también que pueden utilizar los cantos de  ranas de la especie Pelophylax perezi como referencia durante sus desplazamientos hacia las charcas que comparten con ellas (Diego-Rasilla y Luengo, 2007); sin embargo, tritones palmeados pertenecientes a poblaciones que no están en contacto con esta especie de rana no responden fonotácticamente a sus cantos, lo que sugiere que el reconocimiento de llamadas simpátricas heteroespecíficas puede ser un comportamiento aprendido (Diego-Rasilla y Luengo, 2007). Muestran una gran capacidad colonizadora de nuevos hábitats, ya que colonizan en la primera estación reproductora pequeñas charcas de nueva creación alejadas incluso varios km de otros medios acuáticos (Montori y Herrero, 2004; Diego-Rasilla y Luengo, 2007). Presentan una gran capacidad dispersiva que puede verse favorecida por el hecho de orientarse acústicamente hacia los cantos de los anuros que ocupan las charcas (Diego-Rasilla y Luengo, 2007).

 

Comportamiento

En la fase acuática se muestran muy activos durante el día, localizándose entre la vegetación sumergida. Durante la noche, suben hacia la superficie y se acercan a la orilla, manteniéndose al descubierto (Diego-Rasilla y Ortiz-Santaliestra, 2009). Durante los primeros días de la fase terrestre los adultos suelen permanecer en las cercanías del agua, refugiados bajo troncos, rocas u otros refugios, antes de dispersarse por los alrededores. Los individuos recién metamorfoseados frecuentemente permanecen cerca de su charca antes de dispersarse al llegar el otoño; se mantienen entre la vegetación de las orillas o refugiados bajo rocas en grupos de numerosos ejemplares (Galán, 1985).

Las hembras se ven atraídas con igual intensidad por los olores procedentes de machos y hembras, lo que sugiere que no discriminan entre sexos o bien que, si lo hacen, no muestran una respuesta diferente por uno u otro sexo. En esta especie los estímulos químicos parecen promover la atracción conespecífica favoreciendo la agregación de machos y hembras en las charcas de reproducción (Secondi et al., 2005).

 

Referencias

Ayllón, E., Bosch, J., Diego-Rasilla, F.J., Hernández, P.L., Mora, A., Rodríguez-García, L. (2010). Anfibios y reptiles del Parque Nacional de los Picos de Europa. Naturaleza y Parques Nacionales. Serie Técnica. Organismo Autónomo Parques Nacionales. Ministerio de Medio Ambiente y el Medio Rural y Marino, Madrid. 211 pp.

Barbadillo, L.J. (1987). La guía INCAFO de los anfibios y reptiles de la Península Ibérica, Islas Baleares y Canarias. INCAFO, Madrid. 694 pp.

Bas, S. (1982). La comunidad herpetológica de Caurel: Biogeografía y Ecología. Amphibia-Reptilia, 3: 1-26.

Braña, F. (1980). Notas sobre el género Triturus Rafinesque, 1815. (Amphibia: Caudata). I.-Observaciones fenológicas y sobre el desarrollo larvario de Triturus marmoratus, T. alpestris y T. helveticus. Boletín de Ciencias de la naturaleza I.D.E.A., 26: 211-220.

Diego-Rasilla, F.J., Luengo, R.M. (2007). Acoustic orientation in the palmate newt, Lissotriton helveticus. Behavioral Ecology and Sociobiology, 61: 1329-1335.

Diego-Rasilla, F.J., Luengo, R.M., Phillips, J.B. (2008). Use of a magnetic compass for nocturnal homing orientation in the palmate newt, Lissotriton helveticus. Ethology, 114: 808–815.

Diego-Rasilla, F.J., Ortiz-Santaliestra, M.E. (2009). Los Anfibios. Colección Naturaleza en Castilla y León. Caja de Burgos, Burgos. 237 pp.

Fretey, J. (1975). Guide des Reptiles et Batraciens de France. Hatier, Paris. 238 pp.

Galán, P. (1985). Morfología y fenología del tritón palmeado, Triturus helveticus (Razoumowsky, 1789) en el noroeste de la Península Ibérica. Alytes (Merida), 3: 31-50.

García-París, M. (1985). Los anfibios de España. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Madrid. 287 pp.

Montori, A., Herrero, P. (2004). Caudata. Pp. 43-275. En: Amphibia. Lissamphibia. García-París, M., Montori, A., Herrero, P. Fauna Ibérica, 24, Ramos, M. A. et al. (Eds.). Museo Nacional de Ciencias Naturales, CSIC., Madrid.

Secondi, J., Haerty, W., Lodé, T. (2005). Female attraction to conspecific chemical cues in the palmate newt Triturus helveticus. Ethology, 111: 726-735.

 

Francisco Javier Diego-Rasilla
Departamento de Biología Animal, Universidad de Salamanca

Fecha de publicación: 15-04-2011

Diego-Rasilla, F. J. (2014). Tritón palmeado – Lissotriton helveticus. En: Enciclopedia Virtual de los Vertebrados Españoles. Salvador, A., Martínez-Solano, I. (Eds.). Museo Nacional de Ciencias Naturales, Madrid. http://www.vertebradosibericos.org/