Gardí - Scardinius erytrophthalmus (Linnaeus, 1758)

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Portada

 

Identificación

 

Estatus de conservación

 

Distribución

 

Hábitat

 

 

Ecología trófica

 

Biología de la reproducción

 

Interacciones entre especies

 

Comportamiento

 

Bibliografía

 

 

Key words: Common Rudd, reproduction.

 

Biología de la reproducción

El gardí se reproduce durante los meses de primavera e inicios de verano (de abril a julio) según dependiendo de su posición geográfica. En general, empiezan a reproducirse cuando el agua alcanza los 14-15ºC (Kennedy y Fitzmaurice, 1974).

En la Península Ibérica (lago de Banyoles) se concretó que este ciprínido se reproduce durante las dos primeras semanas de mayo, con un solo lote de huevos y mostrando un proceso de ovogénesis sincronizado (Vila-Gispert y Moreno-Amich, 2000). Esos resultados difieren de la mayoría de estudios realizados en otras zonas donde el gardí habita, en los cuales la puesta es fraccionada produciendo diferentes lotes durante el período reproductivo (Kucharczyk et al., 1997; Tarkan, 2006; Kottelat y Freyhof, 2007). Este hecho se ha atribuido a la baja productividad del lago de Banyoles, donde la disponibilidad de alimento para el gardí en este sistema se vería reducida (Vila-Gispert y Moreno-Amich, 2000).

Las puestas de huevos pueden variar mucho entre hembras. En el mismo estudio de Vila-Gispert y Moreno-Amich (2000), se encontraron valores de fecundidad entre 23019 y 59248 huevos por individuo. En cambio, Kapuscinski et al. (2012a) encontraron fecundidades entre 12827 y 156775 huevos por hembra en individuos entre 2 y 15 años en el norte del río Niagara, Estados Unidos. De hecho, una hembra de gardí puede llegar a depositar 100000 huevos en un solo desove. En general, se ha observado que los individuos mayores en longitud y peso producen huevos más grandes, pero en menor cantidad (Kennedy y Fitzmaurice, 1974).

En un estudio con individuos de diferentes ríos y lagos de Irlanda encontraron que, en general, los machos experimentan su primer período reproductivo a los tres años, mientras que las hembras a los cuatro. En este caso, se encontraron machos maduros de tan solo 8.2 cm de longitud y hembras maduras de 9.4 cm. La talla en la cual los individuos se vuelven maduros no solo depende de la edad sino también de las diferentes tasas de crecimiento de los peces en función de las aguas donde se encuentran (Kennedy y Fitzmaurice, 1974). De este modo, Zerunian et al. (1986) observaron que los gardís macho del lago Bracciano, Italia, eran sexualmente maduros a partir del primer año de vida, mientras que las hembras, a partir del segundo. Esta discrepancia podría ser resultado de variaciones latitudinales: la madurez sexual se suele alcanzar primero en poblaciones que viven a bajas latitudes (p.e. Italia respecto Irlanda) y se alcanza más tarde en latitudes altas (Vila-Gispert et al., 2002; Tarkan et al., 2010).

Durante el desove, los machos no se comportan de manera territorial marcando límites entre zonas. De hecho, forman grupos inestables y cambiantes en las áreas donde desovan. Las hembras maduras son conducidas a estas áreas, en un proceso donde se generan persecuciones, chapoteos y salpicaduras. Más de un macho forma parte de la freza, de manera que, un solo individuo puede fecundar a varias hembras diferentes (Kennedy y Fitzmaurice, 1974).

En general, la puesta tiene lugar en sitios poco profundos, con abundante vegetación (en las raíces o partes de plantas sumergidas) y cerca de la orilla. Los huevos son dispersados entre las plantas de manera individual o en pequeños grupos y normalmente se encuentran en altas densidades. Formados por una sola capsula firme y con forma esférica, presentan un espacio perivitelino de tamaño medio y sin presencia de glóbulos de reserva de lípidos. Son pegajosos desde el momento que se depositan. En general, tienen apariencia transparente e incolora, pero pueden presentarse en un tono amarillo pálido y suelen medir alrededor de 1.5 mm de diámetro (Kennedy y Fitzmaurice, 1974). Los huevos de puestas producidas por los individuos del lago de Banyoles (NE España), presentan un tamaño medio de 1.2 mm de diámetro (Vila-Gispert y Moreno-Amich, 2000).

Durante el período de reproducción, los machos pueden presentar tubérculos nupciales de minúsculos a pequeños en la parte anterior del cuerpo (Burkhead y Williams, 1991), aunque esta característica no se manifiesta obligatoriamente en todos los individuos (Kennedy y Fitzmaurice, 1974). Las hembras presentan unos abdómenes redondos y distendidos (Burkhead y Williams, op.cit.).

 

Estructura y dinámica de poblaciones

No hay datos de estructura y dinámica de poblaciones del gardí en la Península Ibérica. El número de individuos capturados en una población del río Niagara (Estados Unidos) fue de 87 machos frente a 91 hembras, mostrando que la proporción sexual de esta población en concreto era 0.96:1 (Kapuscinski et al., 2012a). De forma similar, en un estudio reciente en el embalse de Ömerli (Turquía), la proporción de machos encontrada respecto a las hembras fue de 0.80:1. Aun así, cabe destacar que, en este mismo estudio señalan que previamente en poblaciones de otros lagos de Turquía, los valores sex ratio fueron 1.2:1, 0.64:1 y 0.53:1 (Gaygusuz, 2018). También en Turquía, se observó una proporción de 0.16:1 (Yılmaz et al., 2015). Estos resultados reflejan que existe alta variabilidad en las proporciones sexuales, aunque en general, las hembras son más predominantes.

En el norte de Auckland (Nueva Zelanda), donde el gardí fue introducido, se ha observado que su crecimiento en longitud es excepcionalmente rápido. Las tallas máximas encontradas para el primer, segundo, tercer y cuarto año de vida fueron 120, 155, 198 y 246 mm respectivamente, con un pequeño período de crecimiento más lento durante el invierno (Lane, 1983). En un estudio realizado en varios embalses y lagos de Dakota del Sur (Estados Unidos) encontraron tres poblaciones estables de gardí. El patrón general de capturas reveló que en los primeros muestreos se encontraron pocos ejemplares, pero la abundancia relativa (cuantificada como capturas por unidad de esfuerzo) fue aumentando hasta quedar estable al cabo de unos años. En los tres lagos, las poblaciones estaban mayoritariamente compuestas por individuos de más de 250 mm. Según los autores, el reclutamiento parecía ser relativamente constante. Por ejemplo, en uno de los tres lagos estudiados, en 2003 encontraron individuos de 2 a 7 años, en 2004 de 3 a 8 años y en 2007 de 2 a 10 años. Además, la mortalidad natural del gardí estimada variaba de 32 a 51%, considerado un valor aparentemente bajo. El crecimiento en Dakota del Sur también parecía ser relativamente rápido: en dos lagos el gardí superaba los 230 mm de longitud total a edad 3 y 4. En este caso en concreto, podría resultar que las poblaciones habrían sido introducidas recientemente y aún se encontraran en período de expansión (Blackwell et al., 2009).

En el lago Ladik (Turquía) se determinó el crecimiento y la estructura de la población que vive en sus aguas más superficiales y eutróficas. Los datos obtenidos mostraron que esta población está mayoritariamente formada por individuos jóvenes y, según los autores, con una tasa de crecimiento considerada lenta. Para ello, se utilizó un total de 1329 individuos capturados, de los cuales 1146 resultaron hembras (86.23%) y solamente 183 resultaron machos (13.77%). La población de gardí estaba representada por seis clases de edad, desde 2 hasta 7 años. En este caso, el grupo edad 4 dominaba con un 33.56% de los individuos. En relación a la longitud furcal y peso, los autores encontraron diferencias entre machos y hembras. La longitud furcal media de las hembras fue de 15.6 cm mientras que la de los machos era de 12 cm. Fue igualmente distinta la distribución de las tallas y pesos para ambos géneros. También se calcularon los modelos de crecimiento von Bertalanffy separados por sexo, encontrando valores mayores para el peso y longitud máximos teóricos para hembras. Esta situación podría asociarse al hecho que las hembras pueden presentar crecimientos menores, pero esperanzas de vida más largas. El factor de condición de Fulton aumentaba progresivamente con la edad y resultó ser significativamente diferente entre machos y hembras, siendo las hembras las que presentaban mejor condición (Yılmaz et al., 2015).

En relación a la estructura de edades, en el sur de Noruega observaron que dentro de un mismo río, en aguas más dulces predominaban individuos de menor edad respecto a aquellos que vivían en partes más salobres (más cerca de la desembocadura). En este mismo trabajo, no encontraron diferencias en cuanto a crecimiento, es decir, el tamaño de los individuos respecto a la edad no variaba en función de la posición y, en consecuencia, de la salinidad de las aguas (Johnsen, 2003).

 

Referencias

Blackwell, B. G., Kaufman, T. M., Miller, W. H. (2009). Occurrence of rudd (Scardinius erythrophthalmus) and dynamics of three populations in South Dakota. Journal of Freshwater Ecology, 24 (2), 285-291.

Burkhead, N. M., Williams, J. D. (1991). An intergeneric hybrid of a native minnow, the golden shiner, and an exotic minnow, the rudd. Transactions of the American Fisheries Society, 120 (6): 781-795.

Gaygusuz, Ç. G. (2018). Age and growth of rudd, Scardinius erythophthalmus (Linnaeus, 1758), in Ömerli Reservoir (İstanbul, Turkey). Aquatic sciences and engineering, 33 (1), 25-31.

Johnsen, S. E. (2013). To migrate or not to migrate-thats the question: why do rudd (Scardinius erythrophthalmus) in the Storelva system migrate to Sandnesfjorden? Tesis de máster. Norwegian University of Life Sciences, Ås, Noruega.

Kapuscinski, K. L., Farrell, J. M., Wilkinson, M. A. (2012a). Feeding patterns and population structure of an invasive cyprinid, the rudd Scardinius erythrophthalmus (Cypriniformes, Cyprinidae), in Buffalo Harbor (Lake Erie) and the upper Niagara River. Hydrobiologia, 693(1): 169-181.

Kennedy, M., Fitzmaurice, P. (1974). Biology of the rudd Scardinius erythrophthalmus (L) in Irish waters. Proceedings of the Royal Irish Academy. Section B: Biological, geological, and chemical science, 74: 245-303.

Kottelat, M., Freyhof, J. (2007). Handbook of European freshwater fishes. Publications Kottelat, Cornol, Switzerland.

Kucharczyk, D., Kujawa, R., Mamcarz, A., Wyszomirska, E. (1997). Induced spawning in rudd (Scardinius erythrophthalmus L.). Polskie Archiwum Hydrobiologii, 44(1-2): 209-213.

Lane, W. L. (1983). The population dynamics, food and reproductive habits of rudd (Scardinius erythrophthalmus L.) in New Zealand. Tesis doctoral. University of Auckland, Auckland, Nueva Zelanda.

Tarkan, A. S. (2006). Reproductive ecology of two cyprinid fishes in an oligotrophic lake near the southern limits of their distribution range. Ecology of Freshwater Fish, 15(2): 131-138.

Tarkan, A. S., Lappalainen, J., Nurminen, L., Horppila, J. (2010). Life history strategies of fish: patterns in growth and lifespan of rudd. Scardinius erythrophthalmus (L.) in Europe. Polish Journal of Ecology, 58 (1): 191-196.

Vila-Gispert, A., Moreno-Amich, R. (2000). Fecundity and spawning mode of three introduced fish species in Lake Banyoles (Catalunya, Spain) in comparison with other localities. Aquatic Sciences, 62(2): 154-166.

Vila-Gispert, A., Moreno-Amich, R., Garcia-Berthou, E. (2002). Gradients of life-history variation: an intercontinental comparison of fishes. Reviews in Fish Biology and Fisheries, 12 (4): 417-427.

Yılmaz, S., Yazıcıoğlu, O., Polat, N. (2015). Population structure and growth of rudd Scardinius erythrophthalmus (L., 1758) from a eutrophic lake in northern Anatolia. Croatian Journal of Fisheries: Ribarstvo, 73 (3): 94-102.

Zerunian, S., Valentini, L., Gibertini, G. (1986). Growth and reproduction of rudd and redeye roach (Pisces, Cyprinidae) in Lake Bracciano. Italian Journal of Zoology, 53 (1): 91-95.

 

Cristina Galobart y Anna Vila Gispert
GRECO, Instituto de Ecología Acuática
Universidad de Girona, 17003 Girona

Fecha de publicación: 10-06-2020

Galobart, C., Vila Gispert, A. (2019). Gardí – Scardinius erythrophthalmus. En: Enciclopedia Virtual de los Vertebrados Españoles. López, P., Martín, J., García-Berthou, E. (Eds.). Museo Nacional de Ciencias Naturales,Madrid. http://www.vertebradosibericos.org/