Topillo de Cabrera - Microtus cabrerae Thomas, 1906

Para más información sobre cada apartado hacer click en:

 

Portada

 

Identificación

 

Estatus de conservación

 

Distribución

 

Hábitat

 

Ecología trófica

 

Biología de la reproducción

 

Interacciones entre especies

 

Comportamiento

 

Bibliografía

 

 

Key words: Cabrera’s vole, habitat, abundance, status, threats.

 

Hábitat

El topillo de Cabrera se encuentra sobre todo en los sistemas agro-silvopastorales dominados por el alcornoque Quercus suber y la carrasca Q. rotundifolia (Ayans 1992; Santos et al., 2005, 2006), así como en áreas agrícolas abiertas con pequeñas manchas arbustivas relativamente espaciadas (Pita et al., 2006, 2007). En estos sistemas, la especie ocupa parcelas de hábitats dominados por pastos húmedos perennes con abundantes comunidades de juncos, típicamente cerca de pequeños arroyos, lagunas y márgenes de campos agrícolas con elevada humedad en el suelo (Ayans 1992; Fenández-Salvador 1998; Luque-Larena y López 2007; Pita et al., 2006, 2007, 2011b; Santos et al., 2006, 2007; Figura 1). Estos parches de hábitat normalmente no sobrepasan los 2,000 m2 (generalmente menores de aproximadamente 500 m2), y en la mayoría de los casos son alimentados por la capa freática, o por sistemas de riego, siendo muchas veces delimitados por áreas de cultivo o por vegetación xerofítica, que raramente son utilizados por los topillos (Ayans 1992; Pita et al., 2011b).

 

Figura 1. Ejemplo de hábitat típico de topillo de Cabrera (Sines, Portugal) (C) R. Pita

 

Dentro de los parches de hábitat, el topillo de Cabrera selecciona microhábitats con cubertura herbácea alta (generalmente> 30 cm) y densa (cerca del 100%), la cual ofrece protección contra temperaturas extremas y depredadores (Luque-Larena y López 2007; Pita et al., 2006, 2011b). Los hábitats de alta calidad son típicamente dominados por gramíneas perennes como Agrostis castellana, Briza maxima, Festuca ampla, Brachypodium phoenicoides, Holcus lanatus y Phalaris coerulescen (Santos et al., 2006). Las hierbas anuales más representativas incluyen Vulpia myuros, Gaudinia fragilis, Avena barbata, Bromus hordeaceus, B. madritensis y Agrostis pourretii (Ayans 1992; Santos et al., 2006). Entre la vegetación de juncos, las especies más frecuentes son Juncus, Carex y Scirpus (Ayans 1992; Santos et al., 2006). Las especies de dicotiledóneas comúnmente encontradas en los hábitats del topillo de Cabrera incluyen Leontodon, Hypericum humifusum y Tolpis barbata. Especies de cañizales como Phragmites y Typha y arbustos como Rubus, Cistus, Ulex, Genista, Dittrichia viscosa y Lavandula luisieri pueden ser también comunes en los parches de hábitat herbáceos húmedos utilizados por la especie (Ayans, 1992; Santos et al., 2006; Pita et al., 2011b). Junto con los juncos y cañizales, esta vegetación sirve principalmente como áreas de refugio y nidificación (Fernández-Salvador, 1998; Santos et al., 2006; Luque-Larena y López 2007; Pita et al. 2011b).

En paisajes fragmentados, también se ha reportado que la vegetación húmeda de herbáceas a lo largo de los bordes de carreteras puede proporcionar hábitats alternativos para el topillo de Cabrera (Ayans 1992; Pita et al 2006; Santos et al 2006, 2007). Sin embargo, estos hábitats son normalmente dominados por gramíneas anuales, así como por especies ruderales y nitrófilas, proporcionando hábitats subóptimos y de bajo valor nutricional, particularmente durante el verano (Santos et al., 2007). Además, los hábitats en los bordes de la carretera están normalmente asociados a una mayor interferencia en la gestión (por ejemplo, siega de la vegetación), y se supone que están también asociados con un aumento de las tasas de mortalidad por atropellamiento (Pita et al., 2014).

A pesar de su especialización en el hábitat, el topillo de Cabrera parece seleccionar los tipos de vegetación preferencial de manera diferente de acuerdo con las estaciones del año y la escala espacial de análisis, siendo la selección de vegetación húmeda mucho más fuerte durante los meses cálidos y secos de verano, y a escalas espaciales finas (Santos et al., 2005; Luque-Larena y López 2007; Pita et al., 2011b). Estos cambios estacionales en los perfiles de selección del hábitat están probablemente relacionados con los cambios en la calidad del hábitat, una vez que los sitios dominados por vegetación húmeda presentan, en general, un mayor riesgo de inundación durante la estación húmeda, manteniendo por otro lado la humedad del suelo y protección para anidación durante el verano (Pita et al., 2011b).

 

Abundancia

El topillo de Cabrera es trampeado poco frecuentemente en estudios de fauna silvestre (Landete-Castillejos et al., 2000), siendo considerado como una especie de captura difícil (Fernández-Salvador et al., 2001). Esto hecho hace particularmente difícil la realización de censos precisos para estimar el tamaño y dinámica de las poblaciones con base en datos de captura. Por esta razón, la mayoría de los estudios sobre la ecología de las poblaciones del topillo de Cabrera se han basado en gran medida en el análisis de egagrópilas de rapaces (la lechuza, Tyto alba) (Rodríguez y Peris 2007; Mira et al., 2008), así como en sus indicios de presencia específicos (Santos et al., 2005; Pita et al., 2007), los cuales san por veces utilizados para obtener índices de abundancia (Ayans, 1992; Santos et al., 2006).

Estudios basados ​​en técnicas de captura-marcación-recaptura han aportado importantes datos sobre las abundancias locales y dinámica poblacional (Landete-Castillejos et al., 2000; Fernández-Salvador et al., 2005b; Rosário, 2012). En una población de Riópar (Albacete, España), muestreada durante 65 meses (octubre de 1998 a abril de 1999), las estimativas de densidad variaron entre 66 individuos/ha en invierno, y 255 individuos/ha en marzo (Landete-Castillejos et al., 2000). Estos valores de densidad están dentro del rango generalmente encontrado para otras especies de roedores en hábitats de pastizal abierto (áreas agrícolas y estepas, Jedrzejewski y Jedrzejewska, 1996; Landete-Castillejos et al., 2000). Estas estimaciones fueron muy superiores a las reportadas en Fernández-Salvador et al. (2005a) en una población de Cuenca (España) muestreada mensualmente entre abril de 1997 y abril de 1999, que variaron entre 17 y 115 individuos/ha, alcanzando valores máximos en agosto-septiembre de 1997, seguido de 2 picos en marzo-abril de 1998 y abril 1999 (Fernández-Salvador et al., 2005b). Las estimativas de densidad en 4 hábitats cerca de Grândola (Portugal), muestreados entre enero y diciembre de 2004, también fueron mucho más bajas, oscilando entre 12,44 individuos/ha en mayo, agosto y septiembre, y 49,75 individuos/ha en diciembre (Rosário, 2012). De hecho, el número medio de individuos en parches de hábitat menores de 300 m2 es <1 (Fernández-Salvador et al., 2005b), y se ha sugerido que pueden ser necesarios parches de hábitat de cerca de 500 m2 para garantir la persistencia de una pareja y su descendencia (Pita et al., 2010). Sin embargo, a pesar de las diferencias en las estimativas de densidad obtenidas en los diferentes estudios, todos ellos sugieren que, aparte del máximo de verano durante el primer año en el estudio de Fernández-Salvador et al. (2005a), en general la abundancia de topillos de Cabrera deberá aumentar desde el invierno hasta el final de la primavera, y es muy probable que disminuya hasta el final del verano, particularmente en los años más calientes y secos, cuando hay marcados decrecimos en la calidad y cuantidad de hábitat (Fernández-Salvador et al., 2005b; Pita et al., 2006, 2010, 2014)

 

Estatus de conservación

El estatus de conservación del topillo de Cabrera ha sido cambiado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza de "Bajo Riesgo/Cuasi Amenazado" (Baillie y Groombridge 1996) para "Cuasi amenazado" en 2008. Esto cambio se basó en el restricto rango geográfico de la especie, y su reducida área de ocupación estimada (criterio B2), como resultado de la severa fragmentación de hábitats adecuados y disminuciones de las poblaciones en muchas áreas donde la especie estuvo presente en el pasado (Fernandes et al., 2008). De hecho, aparte de las recientes nuevas aportaciones en algunas localidades donde la especie no era conocía previamente (Garrido-García et al., 2008; Ortuño, 2009), las observaciones empíricas sugieren una tendencia regresiva general de las poblaciones tanto a nivel local como regional (Fernández-Salvador, 2007b). Por ejemplo, en España se estima que, en los últimos 10 años, aproximadamente un tercio de las poblaciones de topillo de Cabrera en Cuenca, Toledo, Albacete y Madrid han desaparecido o cambiado considerablemente. También las poblaciones de Andalucía, Huesca, Zaragoza, Navarra y Zamora han sufrido fuertes reducciones y altas tasas de extinción local (Fernández-Salvador 2007b). No se conocen las tendencias de la población en Portugal, pero también se sospecha que en la mayor parte de su distribución se han verificado declives pronunciados recientes (Queiroz et al., 2005). A nivel nacional, la especie se clasifica actualmente como "Vulnerable" en España (criterio B2ab (iii), Fernández-Salvador 2007b) y Portugal (criterio B2ab (ii, iii, iv, v), Queiroz et al., 2005), aunque en el pasado el estado de conservación nacional era "Raro" en ambos países (Blanco y González, 1992; SNPRCN, 1990).

El topillo de Cabrera está protegido por la legislación de la Unión Europea, constando en los anexos II y IV de la Directiva Hábitats (Directiva 92/43/CEE del Consejo), que implican respectivamente, la designación de zonas especiales de conservación, y la necesidad de una protección estricta de la especie. El topillo de Cabrera también figura como una especie estrictamente protegida en el anexo II de la Convención sobre la conservación de la vida silvestre y de los hábitats naturales europeos 1979 (Convención de Berna).

 

Factores de amenaza

Las principales amenazas para el topillo de Cabrera están relacionadas con la intensificación de las actividades humanas que reducen la disponibilidad de hábitats adecuados, incluyendo la intensificación agrícola, el sobrepastoreo, la construcción o ampliación de carreteras, y la urbanización (Fernández-Salvador 2007a, 2007b). En particular, la destrucción y fragmentación del hábitat debido a la intensificación agrícola se han referido como una de las amenazas más prominentes para la especie (Fernández-Salvador 2007a, 2007b). La naturaleza de los hábitats adecuados para el topillo de Cabrera, los torna en áreas muy deseadas para la agricultura, y en los últimos años grandes cantidades de hábitat otrora adecuado para la especie han sido convertidos en áreas intensamente cultivadas y/o pastoreadas (Landete-Catillejos et al., 2000; Pita et al., 2006, 2007; Fernández-Salvador 2007b). Además, la especie puede estar también sometida a fuertes fluctuaciones naturales inter-estacionales e inter-anuales (por ejemplo, en las condiciones climáticas locales) que afectan su abundancia y éxito de reproducción (Fernández-Salvador et al., 2001, 2005a; Rosário 2012; Pita et al., 2014). De hecho, la especie parece ser particularmente sensible a los cambios climáticos extremos (Garrido García y Soriguer-Escofet, 2012; Laplana y Sevilla, 2013), previéndose una reducción considerable de su rango de distribución en diferentes escenarios climáticos para los próximos 80 años (Araújo et al., 2011; Mestre et al., 2015).

 

Medidas de conservación

La conservación del topillo de Cabrera implica principalmente la protección de sus hábitats (Fernández-Salvador 2007a; Queiroz et al., 2005; Pita et al., 2006, 2007; Rosário 2012), posiblemente implicando algún tipo de medidas o programas agroambientales y regímenes de condicionalidad, por los cuales los agricultores podrían ser compensados ​​por mantener manchas de pastizales y junqueras húmedas con vegetación alta y densa (Pita et al., 2006).

El manejo del hábitat a escala local debe contemplar la retención de parches de hábitat extensos (hasta 2.000 m2) que puedan incluir varias parejas reproductoras y su descendencia (Pita et al., 2010). Deben hacerse esfuerzos para prohibir la deposición de escombros y basuras en los hábitats, y limitar operaciones como su siega, quema, arado, o pulverización con herbicidas (Fernández-Salvador 2007a). Se debe evitar el sobrepastoreo de ganado, aunque el pastoreo extensivo ocasional puede ser considerado para prevenir la eventual degradación del hábitat debida al excesivo desarrollo del estrato arbustivo (Fernández-Salvador 1998, 2007a, 2007b; Pita et al. 2006, 2007; Santos et al., 2007). En los casos en que no es posible proteger los hábitats locales, la translocación de animales de parches afectados por actividades humanas (por ejemplo, por la construcción de infraestructuras como carreteras) a otras zonas adecuadas podría ser una opción, aunque su éxito aún debe evaluarse (Gisbert et al. al., 2007).

A escala del paisaje se debe considerar la distribución espacial de los parches de hábitat para evitar el aislamiento de las colonias o poblaciones locales, de modo que disminuyan los riesgos de endogamia y extinción local, y incrementar la probabilidad de colonización (Pita et al., 2007). También se debe dar particular importancia a la calidad de la matriz que rodea los parches de hábitat favorable, ya que esta puede afectar fuertemente la capacidad de dispersión del topillo de Cabrera. En este contexto, la mejora de la conectividad paisajística para la persistencia de las poblaciones a largo plazo debe considerar no sólo la protección de redes apropiadas de parches de hábitat, sino también el mantenimiento de tipos de matriz permeables, como parece ser el caso de pastizales de uso extensivo (Pita et al., 2007).

En España se han designado Zonas Importantes para los Mamíferos (ZIM) relacionadas entre otras especies con M. cabrerae (Lozano et al., 2016).

 

Referencias

Araújo, M. B., Guilhaumon, F., Rodrigues Neto, D., Pozo Ortego, I., Gómez Calmaestra, R. (2011). Impactos, vulnerabilidad y adaptación de la biodiversidad española  frente al cambio climático. 2. Fauna de vertebrados. Dirección general de medio Natural y Política Forestal. Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, Madrid. 640 pp.

Ayanz, S. M. (1992). Inventario de la población española de Topillo de Cabrera (Microtus cabrerae Thomas, 1906). Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación, Madrid.

Baillie, J., Groombridge, B. (1996). International Union for Conservation of Nature and Natural Resources Red List of Threatened Animals. World Conservation Union, Gland.

Blanco, J. C., González, J. L. (1992). V. Fichas descriptivas de las especies y subespecies amenazadas: Mamíferos. Pp. 515-681. En: Blanco, J. C., González, J. L. (Eds.). Libro rojo de los vertebrados de España. Instituto para la Conservación de la Naturaleza, Madrid.

Fernandes, M., Pita, R., Mira, A. (2008). Microtus cabrerae. The IUCN Red List of Threatened Species 2008: e.T13418A3915236

Fernández-Salvador, R. (1998). Topillo de Cabrera, Microtus cabrerae Thomas, 1906. Galemys, 10: 5-18.

Fernández-Salvador, R. (2007a). Biología y ecología de Microtus cabrerae Thomas, 1906 (Rodentia: Cricetidae). Tesis doctoral. Universitat Autònoma de Barcelona. Barcelona.

Fernández-Salvador, R. (2007b). Microtus cabrerae Thomas, 1906. Topillo de Cabrera. Pp. 429-433. En: Palomo, J. L., Gisbert, J., Blanco, J. C. (Eds.). Atlas y Libro Rojo de los mamíferos terrestres de España. Dirección General para la Biodiversidad, SECEM-SECEMU, Madrid. 586 pp.

Fernández-Salvador, R., García-Perea, R., Ventura, J. (2001). Reproduction and postnatal growth of the Cabrera vole, Microtus cabrerae, in captivity. Canadian Journal of Zoology, 79: 2080-2085.

Fernández-Salvador, R., García-Perea, R., Ventura, J. (2005a). Effect of climatic fluctuations on body mass of a Mediterranean vole, Microtus cabrerae. Mammalian Biology, 7: 73-83.

Fernández-Salvador, R., Ventura, J., García-Perea, R. (2005b). Breeding patterns and demography of a population of the Cabrera vole, Microtus cabrerae. Animal Biology, 55: 147-161.

Garrido-García, J. A., Soriguer-Escofet, R. C. (2012). Cabrera's Vole Microtus cabrerae Thomas, 1906 and the subgenus Iberomys during the Quaternary: evolutionary implications and conservation. Geobios, 45: 437-444.

Garrido-García, J. A., Soriguer, R. C., Pérez-Aranda Serrano, D., Pardávila, X. (2008). A revision of the distribution of Cabrera’s vole (Microtus cabrerae Thomas 1906) in Andalucia (southern Spain). Hystrix Italian Journal of Mammalogy, 19: 121-131.

Gisbert, J., García-Perea, R., Fernández-Orueta, J., Aranda, Y. (2007). Experiencia piloto de translocación de topillo de Cabrera, Microtus cabrerae. Primeros resultados. Pp. 88. En: Libro de Resúmenes VII Jornadas de la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de los Mamíferos, Huelva. SECEM, Madrid.

Jedrzejewski, W., Jedrzejewska, B. (1996). Rodent cycles in relation to biomass and productivity of ground vegetation and predation in the Paleartic. Acta Theriologica, 41: 1-34.

Landete-Castillejos, T., Andrés-Abellán, M., Argandoña, J. J., Garde, J. (2000). Distribution of the Cabrera vole in its first reported areas reassessed by life-trapping. Biological Conservation, 94: 127-130.

Laplana, C., Sevilla, P. (2013). Documenting the biogeographic history of Microtus cabrerae through its fossil record. Mammal Review, 43 (4): 309-322.

Lozano, J., Fuente, U., Atienza, J. C., Cabezas, S., Aransay, N., Hernáez, C., Virgós, E. (Coord.) (2016). Zonas Importantes para los Mamíferos (ZIM) de España. SECEM-Tundra Ediciones, Castellón. 780 pp.

Luque-Larena, J. J., López, P. (2007). Microhabitat use by wild-ranging Cabrera voles Microtus cabrerae as revealed by live trapping. European Journal of Wildlife Research, 53: 221-225.

Mestre, F., Pita, R., Paupério, J., Martins, F.M.S, Alves, PC, Mira, A., Beja, P. (2015) Combining distribution modelling and non-invasive genetics to improve range shift forecasting. Ecological Modelling, 297: 171-179.

Mira, A., Marques, C. C., Santos, S. M., Rosário, I. T., Mathias, M. L. (2008). Environmental determinants of the distribution of the Cabrera vole (Microtus cabrerae) in Portugal: Implications for conservation. Mammalian Biology, 73: 102-110.

Ortuño, A. (2009). Nuevos Datos sobre la distribución del topillo de Cabrera Microtus cabrerae Thomas 1906 en Murcia. Galemys, 21: 71-72.

Queiroz, A. L., Alves, P.C., Barroso, I., Beja, P., Fernandes, M., Freitas, L., Mathias, M.L., Mira, A., Palmeirim, J. M., Prieto, R., Rainho, A., Rodrigues, L., Santos-Reis, M., Sequeira, M. (2005). Microtus cabrerae. Pp. 481-482. En: Cabral, M. J., Almeida, J., Almeida, P. R., Delliger, T., Ferrand de Almeida, N., Oliveira, M. E., Palmeirim, J. M., Queirós, A. I., Rogado, L., Santos-Reis, M. (Eds.) Livro Vermelho dos Vertebrados de Portugal. Instituto da Conservação da Natureza, Lisboa.

Pita, R., Beja, P., Mira, A. (2007). Spatial population structure of the Cabrera vole in Mediterranean farmland: The relative role of patch and matrix effects. Biological Conservation, 134:383-392.

Pita, R., Mira, A., Beja, P. (2006). Conserving the Cabrera vole, Microtus cabrerae, in intensively used Mediterranean landscapes. Agriculture, Ecosystems and Environment, 115: 1-5.

Pita, R., Mira, A., Beja, P. (2010). Spatial segregation of two vole species (Arvicola sapidus and Microtus cabrerae) within habitat patches in a highly fragmented farmland landscape. European Journal of Wildlife Research, 56: 651-662.

Pita, R., Mira, A., Beja, P. (2011b). Assessing habitat differentiation between coexisting species: The role of spatial scale. Acta Oecologica, 37: 124-132.

Pita, R., Mira A., Beja P. (2014). Microtus cabrerae (Rodentia: Cricetidae). Mammalian Species, 46 (912): 48-70.

Rodríguez, C., Peris, S.J. (2007). Habitat associations of small mammals in farmed landscapes: implications for agri-environmental schemes. Animal Biology, 57: 301-314.

Rosário, I. T. (2012). Towards a conservation strategy for an endangered rodent, the Cabrera vole (Microtus cabrerae Thomas). Insights from ecological data. Tese de Douturamento. Universidade de Lisboa, Lisboa. 165 pp.

Santos, S., Mathias, M. L, Mira, A., Simões, M. P. (2007). Vegetation structure and composition of road verge and meadow sites colonized by Cabrera vole (Microtus cabrerae Thomas). Polish Journal of Ecology, 55: 481-493.

Santos, S., Rosário, I., Mathias, M. L. (2005). Microhabitat preference of the Cabrera vole in a Mediterranean cork oak woodland of southern Portugal. Vie et Millieu, 55: 53-59.

Santos, S. M., Simões, M. P., Mathias, M. L., Mira, M. (2006). Vegetation analysis in colonies of an endangered rodent, the Cabrera vole (Microtus cabrerae), in southern Portugal. Ecological Research, 21: 197-207.

SNPRCN (1990). Livro Vermelho dos Vertebrados de Portugal. Vol. I - Mamíferos, Aves, Répteis e Anfíbios. Menistério do Ambiente e da Defesa do Consumidor, Lisboa.

 

 

 

Ricardo Pita1, Juan José Luque-Larena2, Pedro Beja3, António Mira1
1CIBIO/InBIO – Universidade de Évora, Portugal
2Departamento de Ciencias Agroflorestales Universidad de Valladolid, España
3CIBIO/InBIO – Universidade do Porto, Portugal

Fecha de publicación: 26-09-2017

Pita, R., Luque-Larena, J. J., Beja, P., Mira, A. (2017). Topillo de Cabrera – Microtus cabrerae. En: Enciclopedia Virtual de los Vertebrados Españoles. Sanz, J. L., Barja. I. (Eds.). Museo Nacional de Ciencias Naturales, Madrid. http://www.vertebradosibericos.org/

 

 

.