Codorniz común - Coturnix coturnix (Linnaeus, 1758)

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Portada

 

Identificación

 

Estatus de conservación

 

Distribución

 

Hábitat

 

 

Voz

 

 

Movimientos

 

Ecología trófica

 

Biología de la reproducción

 

Interacciones entre especies

 

Comportamiento

 

Bibliografía

 

 

 

Key words: Common quail, description, size, variation, moult.

 

Nombres vernáculos

Conocida popularmente como "Codorniz".

Castellano: Codorniz común; catalán: guatlla; gallego: paspallás; vasco: galeperra; alemán: wachtel; francés: caille des blés; inglés: common quail; italiano: quaglia; portugués: codorniz.

 

Sistemática

La Codorniz común es un ave galliforme perteneciente a la familia Phasianidae y subfamilia Phasianinae.

La Codorniz común fue descrita como Tetrao coturnix por el naturalista sueco Carl Nilsson Linnaeus en 1758, en la décima edición de su Systema naturae. Sin embargo, en 1764 fue trasladada por François Alexandre Pierre de Garsault al género Coturnix, creado por este zoólogo francés.

 

Descripción

La codorniz es un ave de aspecto generalmente rechoncho y con un vuelo batido en el que la frecuencia de aleteo es muy alta (Bruderer et al., 2010), lo que contrasta con su carácter migratorio transahariano. Se caracterizan por tener un dorso de color terroso que les ayuda a mimetizarse cuando están posadas en el suelo, con muchas estrías longitudinales de color marrón oscuro y crema y una lista blanca en la ceja. Las partes inferiores son de un tono mucho más pálido, con los flancos listados o, en menor frecuencia, atigrados.

La especie presenta un dimorfismo sexual claramente marcado: los machos presentan un pecho sin motas oscuras y de color marrón anaranjado, siendo el patrón de coloración de la garganta muy variable y complejo; típicamente, presenta un patrón en forma de áncora de color marrón o negro y unas mejillas claras, así como un collar marrón; no obstante, pueden encontrarse ejemplares con mejillas marrones e incluso negras (para más detalles, ver el subapartado de Variación geográfica). Por su parte, las hembras presentan un pecho de color marrón crema con numerosas motas marrón oscuras o negras y la garganta no presenta patrón en forma de áncora, siendo las mejillas claras, generalmente blancas.

En los jóvenes, los machos tienen algunas características de hembra adulta, como un pecho de color marrón claro con motas negras o marrón oscuras, en un número variable pero que va disminuyendo con el paso del tiempo hasta desaparecer por completo. Además, la garganta puede ser de color blanco sin el patrón en forma de áncora, que irá apareciendo gradualmente con el paso del tiempo. Típicamente, las mejillas son de color blanco. Por otra parte, los jóvenes presentan más frecuentemente las plumas de los flancos con bandas transversales (atigrados), mientras que en los adultos aparecen con una menor frecuencia. En una población del noreste de Cataluña, de 181 jóvenes (Euring 3) capturados, el 10% (n= 18) no presentaban bandas transversales mientras que el 90% (n=163) sí las presentaban. Entre los adultos, de 497 individuos (Euring 5) el 60% (n=298) no presentaban estas bandas y el 40% (n=199) si las presentaban (χ2 = 133.4, p<<0.001). 

 

Identificación

A partir de su descripción, la codorniz común resulta muy fácil de identificar visualmente, si bien sobre el terreno podría confundirse con individuos jóvenes en crecimiento de perdiz pardilla (Perdix perdix), así como con el torillo andaluz (Turnix sylvatica) ya que, pese a que en ambos casos el plumaje es diferente, su vuelo es similar (Guyomarc'h et al., 1998). Por otra parte, dados los hábitos marcadamente terrestres de la codorniz común y dado que su ciclo biológico transcurre mayoritariamente en el interior de densos cultivos de cereales de invierno, alfalfa y prados es muy difícil de observar por lo que resulta mucho más fácil de identificar gracias al inconfundible, trisilábico y líquido canto de anuncio de los machos, onomatopéyicamente descrito como par-pa-lá. 

En general, evita desplazarse en vuelo durante el día y cuando lo hace éste es explosivo, a poca altura con respecto al suelo y de poca duración, dando una sensación equivocada de poca capacidad de vuelo. 

Cabe señalar que se ha desarrollado en granjas una cepa de codorniz híbrida entre la codorniz común (Coturnix coturnix) y la codorniz japonesa de granja (Coturnix japonica), obteniéndose al cabo de varias generaciones unos individuos que, si bien presentan introgresión de ADN de codorniz japonesa, son virtualmente indistinguibles a simple vista de la codorniz común silvestre (Sanchez-Donoso et al., 2012). Ello conduce a la necesidad de efectuar análisis genéticos para poder establecer con claridad el origen de estas codornices de granja que, según los productores, son codornices comunes puras, para evitar riesgos de contaminación genética en las poblaciones silvestres de codorniz común. En este sentido, ya desde 1993 los autores venimos previniendo de la presencia de codornices japonesas e híbridos en nuestros campos (Rodríguez-Teijeiro et al., 1993).

 

Tamaño

Las codornices miden entre 16 y 19 cm de largo, con una envergadura alar de entre 32 y 35 cm (McGowan, 1994). Aunque las hembras son ligeramente más grandes que los machos, la distribución de la longitud del tarso y la del ala plegada se solapan en gran medida (Guyomarc'h, 2003). Existen remarcables diferencias de tamaño atendiendo a la distribución geográfica de los individuos (ver el apartado de Variación geográfica).

 

Masa corporal

Genéricamente, se considera que la masa corporal de la especie oscila entre los 70 y los 155 g (McGowan, 1994); ahora bien, los valores habituales se sitúan en torno a los 81-120 g (Glutz et al., 1980), pudiendo incrementarse en la época pre-migratoria, debido a la grasa que acumulan.

No existen diferencias apreciables entre jóvenes y adultos ni entre localidades, siendo el peso medio de 94.88 g (desviación típica: 25.16), la longitud del ala de 11.63 cm (desviación típica: 8.07) y la longitud del tarso de 32.32 mm (desviación típica: 0.94, Tabla 1).

Tabla 1. Valores correspondientes al peso, la longitud estándar, y la longitud del tarso largo (desde el cóndilo del tibiotarso hasta la articulación metatarsofalángea del tercer dedo doblado, Svensson, 1996) de 1336 machos (992 adultos y 330 jóvenes) capturados por los autores en tres localidades de Cataluña (Alp 42º 22.379' N, 1º 53.16'E, provincia de Gerona, y Figuerola del Camp-Pla de Santa María 41º 20.654' N, 1º 19.080'E, provincia de Tarragona) durante la época reproductora del período 2005-2017. DT: desviación típica.

 

 

 

Peso (g)

Long. ala (cm)

Long. tarso (mm)

Localidad

Edad

N

Media

DT

Media

DT

Media

DT

Alp

Adultos

750

94.89

25.45

11.64

8.17

32.32

0.94

Jóvenes

290

94.84

25.34

11.63

8.13

32.32

0.94

Figuerola del Camp-Pla de Santa María

Adultos

242

95.09

26.10

11.68

8.39

32.34

0.93

Jóvenes

40

94.89

27.21

11.74

8.75

32.35

0.92

Total

Adultos y jóvenes

1336

 94.88

25.16

 11.63

 8.07

 32.32

 0.94

La tabla 2 recoge las principales medidas de masa corporal (peso, longitud del ala y longitud del tarso largo) durante la época post-reproductora (finales de agosto, setiembre y octubre) de una muestra de 918 individuos (jóvenes y adultos de ambos sexos) capturados de noche por los autores en el período 2009-2012 en el Parque Natural del Garraf (Barcelona). Esta es una zona que no reúne los requisitos de hábitat de reproducción de la especie y por las fechas en las que se realizaron las capturas (agosto-noviembre), los individuos se debían encontrar en la fase migratoria.  Puede apreciarse que la masa corporal es muy similar en machos y hembras, independientemente de su edad. Comparando la masa corporal de esta muestra con la obtenida durante la época reproductora, se aprecia que, tanto en los machos jóvenes como en los adultos, se ha producido un incremento apreciable del peso debido a la acumulación de grasa necesaria para realizar la migración post-reproductora.

Tabla 2. Medidas de masa corporal (peso, longitud del ala y longitud del tarso largo) de la codorniz común durante la época post-reproductora del período 2009-2012 en Garraf (Barcelona). DT: desviación típica.

 

 

 

Peso (g)

Long. ala (cm)

Long. tarso (mm)

Sexo

Edad

N

Media

DT

Media

DT

Media

DT

Machos

Adultos

121

99.6

11.3

11.19

0.28

32.34

0.98

Jóvenes

448

99.8

11.2

11.18

0.28

32.332

0.99

Hembras

Adultas

55

99.7

11.3

11.18

0.28

32.34

0.98

Jóvenes

294

 99.6

 11.3

 11.19

 0.28

 32.33

0.99

Nuevamente, cabe señalar la existencia de notables variaciones en la masa corporal atendiendo a la distribución geográfica de la especie (ver el apartado de Variación geográfica).

Variación geográfica

Aunque clásicamente se había considerado que las poblaciones de codorniz común eran morfológicamente uniformes en Europa, se han observado diferencias morfológicas que afectan al tamaño (peso, longitud del ala y longitud del tarso) y al aparato de vuelo (índice modificado de Holynski (Lockwood et al., 1998), índice de la muesca de la primaria más externa (10ª primaria), de la escotadura de la 9ª primaria, del álula y de la timonera central de la cola (Fiedler, 2005) en la población occidental de codorniz común. 

Así, en el nordeste de España los individuos adultos en su segundo año de vida (Euring 5) son mayoritariamente de menor tamaño y con un aparato de vuelo más eficaz que en Canarias y sur de Portugal, donde son mayoritariamente de mayor tamaño y con un aparato de vuelo menos eficaz. Estas características morfológicas se han asociado al carácter largo migrador de las primeras y al carácter corto migrador de las segundas (Jiménez-Blasco et al., 2014).

Además, las codornices de la región atlántica, consideradas corto migradoras, tienen mayoritariamente la coloración de las gargantas de un color marrón oscuro, mientras que las largo migradoras tienen las gargantas de un color blanco o marrón claro (Jiménez-Blasco et al., 2019).

Este polimorfismo fenotípico se ha mostrado que está asociado a una inversión cromosómica extensa, de 115 Mbp y que comprende más de 7.000 genes (aproximadamente el 12 % del genoma). Así, los individuos que presentan esta inversión cromosómica (sea de forma homocigótica o heterocigótica) son los que presentan mayor tamaño, unas alas más redondeadas (de lo que se infiere una más pobre eficiencia de vuelo) y una coloración de la garganta más oscura; además, mediante un estudio de isótopos estables se ha evidenciado que estos individuos realizan distancias de migración más cortas o no migran. Por contra, los individuos que no presentan la inversión cromosómica presentan un menor tamaño, unas alas más apuntadas (lo que implica una mayor eficiencia de vuelo) y una coloración de garganta más clara, siendo por su distribución geográfica individuos largo migradores (Sanchez-Donoso et al., 2021).

Muda

La codorniz presenta 10 plumas primarias, 14 secundarias (no tiene diferenciadas plumas terciarias) y de entre 10 a 12 rectrices. En la descripción de la muda seguiremos el trabajo de Saint-Jalme y Guyomarc'h (1995), realizado con ejemplares en cautividad. Para los individuos nacidos en el año calendario hablamos de muda juvenil, post-juvenil estadio 1 y post-juvenil estadio 2 (ver apartado de muda postnatal), mientras que para los individuos adultos hablamos de muda post-reproductora y pre-reproductora.

La codorniz presenta muda parcial, es decir, hay una interrupción de la secuencia de reemplazamiento de las plumas primarias que se reanuda a partir del punto de suspensión. Esta interrupción se da en los adultos en la muda post-reproductora y en los jóvenes en la muda post-juvenil, diferenciando los dos estadios antes citados.

Muda postnatal

El crecimiento de las 7 primeras primarias en el pollo se designa como muda juvenil. Estas plumas están totalmente crecidas a las 4 semanas de vida. A continuación, y coincidiendo con el crecimiento de la octava primaria se inicia la renovación de la primera primaria, dando lugar al inicio de la muda post-juvenil (estadio 1), que terminará con la interrupción de la muda después de la renovación de la cuarta o quinta primaria. En este momento el individuo ya tiene totalmente crecidas las tres primarias más externas (Figura 1) y ha alcanzado las 7 semanas de vida (Saint Jalme y Guyomarc'h, 1995). En general, la renovación del resto de primarias hasta la primaria 8 se realizará en los cuarteles de invierno, proceso que se designa como muda post-juvenil estadio 2 (Figura 2). Al final de esta fase, habrá dos generaciones de plumas, las tres plumas más externas corresponden a la primera generación y se mantendrán hasta la muda post-reproductora del siguiente año cuando los individuos se encuentren de nuevo en los cuarteles de invierno y las restantes corresponden a una segunda generación, aunque las primeras cuatro o cinco plumas habían terminado su crecimiento varios meses antes que las dos o tres plumas restantes.

 

Figura 1. Individuo joven nacido en el año calendario (código EURING: 3) y que ya ha finalizado la muda post-juvenil estadio 1. Las tres primarias más externas (1ª generación) han crecido al mismo tiempo que el ave mudaba las primarias de la 1ª a la 5ª (2ª generación). Por ello presentan una coloración (marrón y amarilla) más contrastada. Sin embargo, las primarias 6ª y 7ª, más desgastadas y con una coloración menos contrastada, corresponden a la 1ª generación de plumas, cuya muda se llevará a cabo en invierno. Se aprecia también la forma más redondeada del final de las plumas 6ª y 7ª, en contraste con la forma más rectangular de las cinco primeras primarias.

 

Figura 2. Individuo que ya ha mudado en los cuarteles de invierno las primarias 5, 6 y 7 (muda post-juvenil estadio 2) y que, a la primavera siguiente, aparece en las áreas de cría con este aspecto, como individuo de código Euring 5 (adulto nacido el año anterior al año calendario). Puede apreciarse claramente cómo las tres primarias más externas (8, 9 y 10) son más viejas, menos contrastadas y más estrechas que el resto.

Muda prenupcial

La codorniz adulta presenta una muda prenupcial, normalmente en las zonas de invernada, en la que renueva las plumas de la cabeza y del cuerpo. Los machos alcanzan así, su plumaje nupcial antes de llegar a las zonas de reproducción (con el característico patrón en forma de áncora en el cuello).

Muda post-reproductora

Durante la muda post-reproductora, la codorniz renueva las plumas primarias de forma secuencial y centrífuga, es decir, desde la pluma primaria más interna a la más externa, interrumpiéndose al inicio de la migración (parada de muda) para continuar mudando, en la mayoría de los casos, cuando llegan a los cuarteles de invierno. La interrupción se produce entre la cuarta o quinta primaria (Figura 3), aunque en cautividad el 40% de los individuos no presentaron interrupción en la muda (Saint Jalme y Guyomarc'h, 1995). La interrupción de la muda se produce en promedio a las 5.4 (±1.9) semanas de su inicio (Saint Jalme y Guyomarc'h, 1995) y se reinicia a los 55 (± 4) días, según información recogida en cautividad (Boswell et al., 1993). La muda de las secundarias no es secuencial y se inicia en dos puntos: S3 y S11, progresando en las dos direcciones desde estas plumas, pero a tasas diferentes. A continuación, mudan de forma secuencial las 3 secundarias más cercanas al cuerpo (S12, S13, S14), sigue entonces el cambio de la S4, S2 y S1. Finalmente, y después de mudar la S10, pasan a mudar la S5 y continúa secuencialmente hasta la S9. Las coberteras de las primarias mudan en la misma secuencia que sus primarias correspondientes.

 

Figura 3. Individuo capturado en las zonas de reproducción, que se encuentra como mínimo en su tercer año de vida (nacido antes del pasado año calendario, Euring 6). Inició la muda post-reproductora al final del periodo de reproducción del año anterior a su captura, mudando las 4 primeras primarias (en algunos casos, las 5). Se observa la coloración más contrastada de las 6 plumas restantes (las más externas), que las ha cambiado, después de una parada de muda, en los cuarteles de invierno. Las tres plumas más externas son anchas en toda su extensión (compárese con las plumas de la figura 2). 

Muda de las primarias durante el paso otoñal

Los datos proceden de un estudio realizado en el macizo de Garraf (41º 14'N, 1º 52'E) durante el paso migratorio otoñal de la codorniz. El periodo de estudio comprende cuatro temporadas (2009-2012) del 1 de agosto hasta el 30 de octubre.

En total se estudiaron 817 codornices, de las que 704 eran jóvenes del año (Euring 3, 86.3%; machos: 427, hembras: 277), 105 adultos Euring 5, es decir, nacidos el año anterior al año calendario (12.9%; machos 61, hembras: 44) y 8 adultos Euring 6, que nacieron con anterioridad al año anterior del año calendario (0.8%; machos: 2, hembras 6). Dado el pequeño número de individuos Euring 6 de la muestra, solo analizaremos los jóvenes y los adultos Euring 5 (que a partir de aquí denominamos adultos).

El 5% de los jóvenes capturados en migración estaba en muda activa con solo una pluma en crecimiento, mientras que en los adultos este porcentaje fue más elevado (17.6%, χ21=13.0, p<<0.001); es decir, la proporción de adultos migrando en muda activa es superior a la de jóvenes. Como era de esperar, todos los jóvenes habían realizado la muda post-juvenil estado 1, pero la primaria en la que pararon la muda presentó cierta variabilidad (el 81.8% detuvo la muda entre la P4 y la P5, tabla 3).

El 5.1% de los jóvenes reiniciaron la muda en las áreas de reproducción y de ellos el 35.3% completó la muda post-juvenil 2 antes de llegar a los cuarteles de invierno. En el caso de los adultos la parada de muda fue más variable (tabla 3) y un 7% de los individuos había cambiado las primeras 7 primarias en las zonas de reproducción.

Tabla 3. Porcentaje de jóvenes y de adultos en función de la última primaria mudada antes de la parada de muda.

 

P1

P2

P3

P4

P5

P6

P7

P8

Joven

3.2

36.2

45.6

11.4

3.3

0.3

Adulto

13.8

6.9

10.3

14.9

20.7

24.1

6.9

2.4

 

Referencias

Boswell, T., Hall, M. R., Goldsmith, A. R. (1993). Annual cycles of migratory fattening, reproduction and moult in European quail (Coturnix coturnix). Journal of Zoology, 231: 627-644.

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Fiedler, W. (2005). Ecomorphology of the external flight apparatus of blackcaps (Sylvia atricapilla) with different migration behavior. Ann. N. Y. Acad. Sci., 1046: 253-263.

Jiménez-Blasco, I., Puigcerver, M., Martínez, B., García-Galea, E., Rodríguez-Teijeiro, J. D. (2014). Variabilidad morfológico-migratoria en la población occidental de codorniz (Coturnix coturnix). En: Quesada, J., Uribe, F.,Carrillo-Ortiz (Eds.). Libro de resúmenes del XV Congreso Nacional y XII Iberoamericano de Etología, p, 22. Museu de Ciències Naturals de Barcelona y SEE.Barcelona.

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Glutz Von Blotzheim, U. N., Bauer, K. M., Bezzel, E. (1973). Handbuch der Vögel Mitteleuropas. Band 4. Akad. Verlag, Frankfurt am Main.

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Svensson, L. (1996). Guía para la Identificación de los Passeriformes Europeos. Sociedad Española de Ornitología. Madrid.

 

 

Manel Puigcerver
Dep. de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales,
Fac. de Biología, Univ. de Barcelona,
Avda. Diagonal, 643, 08014 Barcelona

Francesc Sardà-Palomera
Grup de Biologia de la Conservació,
Centre de Ciència i Tecnologia Forestal de Catalunya,
Ctra. St. Llorenç de Morunys, Km 2, 25280 Solsona

José Domingo Rodríguez-Teijeiro
Dep. de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales,
Fac. de Biología, Univ. de Barcelona,
Avda. Diagonal, 643, 08014 Barcelona

Fecha de publicación: 4-05-2022

Puigcerver, M., Sardà-Palomera, F., Rodríguez-Teijeiro, J. D. (2022). Codorniz Común – Coturnix coturnix. En: Enciclopedia Virtual de los Vertebrados Españoles. López, P., Martín, J., Casas, F. (Eds.). Museo Nacional de Ciencias Naturales, Madrid. http://www.vertebradosibericos.org/